En
el verano de 1953, tras la muerte de Stalin y la deteción de
Lavrenti Beria, el gobierno soviético promulga el decreto "Sobre
la amnistía" que libera de los campamentos de trabajo a miles
de presos. En una remota aldea del norte se esconden dos de ellos, el
ingeniero Nikolai Starobogatov, acusado de ser espía inglés, y el
capitán de un regimiento de reconocimiento Sergei Basargin,
denostado por haber sido prisionero en un campo nazi y después de
fugarse haberse reincorporado a sus tropas.
El
frio verano del 53 es
una mirada atrás hacia la época de la desestalinización, una
película abiertamente política que trata de captar los aciertos y
los errores de la nueva política soviética. Se centra en la
amnistía a los presos políticos, pero también presos comunes. Un
grupo de delincuentes amnistiados atacan un pueblo de pescadores para
robar todo cuanto puedan. Los 2 presoso políticos que se encontraban
refugiados en el pueblo son los que se encargan de defenderlo y los
que, al final, se convierten en héroes. Se trata de captar la
injusticia que se cometió con ellos, pues fueron calificados de
traidores, y de cambiar su imagen por la de víctimas y de patriotas
sacrificados.
También
se podría hacer una analogía entre los asaltantes y los
capitalista, pues su líder carga contra el socialismo con un
argumento propio de los anticomunista, que el comunismo reparte
pobreza, y después hace un llamamiento a coger cuanto uno quiera de
los demás, o sea, lo que los comunistas entienden que hace la clase
burguesa al explotar el trabajador y apropiarse de su trabajo. De
todas formas, me ha parecido una película un tanto simplona, pero
también puede ser debido a que, debido a mi desconocimiento del
tema, no capte todas las referencias y críticas.
Para
mi, lo mejor de la película es el apartado técnico: la puesta en
escena, con localizaciones bellísimas en escenarios naturales y una
aldea de pescadores; el uso predominante de sonidos en la banda
sonora y la fotografía en tonos verdes y azules en exteriores, y
grises y marrones en interiores. Me molesta un poco la música,
demasiado ochentera para mi gusto.
En
definitiva, un estimable ejercicio de justicia histórica y un
tratamiento formal notable para una película interesante y
entretenida.
7/10